Es una variante del reflejo de Moro o reflejo del sobresalto, por el que se comprueba el desarrollo nervioso motor de un lactante suspendiéndolo en decúbito prono y dejándolo caer desde una corta distancia sobre una superficie blanda. Si el desarrollo nervioso motor es normal, el lactante hacia los 4-6 meses extenderá los brazos, las manos y dedos de ambos lados del cuerpo en un movimiento protector.