El procedimiento en el que se mete una sonda de Levin u otra de pequeño calibre a través de la nariz, por el esófago, hasta el estómago, para introducir en él preparados líquidos con el fin de alimentar a pacientes inconscientes o a recién nacidos prematuros o enfermos; se puede administrar medicación o medios de contraste, como tratamiento o para realizar exploraciones gástricas.