Es una crisis de tirotoxicosis incontrolada a causa de la liberación al torrente sanguíneo de cantidades importantes de hormonas tiroideas. La crisis pude aparecer de forma espontánea o precipitarse pro infección, estrés o tiroidectomía realizada en un paciente preparado incorrectamente con fármacos antitiroideos. Los signos característicos son fiebre (puede alcanzar los 41 oC), pulso rápido, dificultad respiratoria aguda, temor, inquietud, irritabilidad y postración: el paciente pude tener delirios, caer en coma y morir de insuficiencia cardíaca.