Trastorno psiquiátrico el cual se caracteriza por una alteración de las relaciones del individuo con los demás (DSM-IV). Forma parte de un grupo numeroso de trastornos mentales caracterizados por patrones de conducta rígida, inflexible y de inadaptación que restan a la persona capacidad para desenvolverse en sociedad debido a una grave limitación de su capacidad de adaptación.