El término describe un tumor que es probable que no desencadene una respuesta inmunitaria fuerte. Los tumores fríos tienden a estar rodeados de células capaces de inhibir la respuesta inmunitaria e impedir que las células T (tipo de célula inmunitaria) ataquen las células tumorales y las destruyan. Por lo general, los tumores fríos no responden a la inmunoterapia. La mayoría de los cánceres de mama, ovario, próstata, páncreas y encéfalo (glioblastoma) se consideran tumores fríos.