Sal del ácido úrico. El urato es producto de la degradación de purinas en primates, aves, reptiles e insectos. Una concentración elevada de ácido úrico en la sangre y tejidos puede provocar la deposición de cristales de urato monosódico en las articulaciones, una enfermedad conocida como gota. Las articulaciones se inflaman, producen dolor y desarrollan artritis.