Flora Vascular de Andalucía Occidental: Hierbas anuales. Hojas pecioladas, formando con las estípulas verticilos de 4 piezas. Flores en cimas de 4 piezas. Flores en cimas trifloras dispuestas en verticilastros bracteados; la central de cada cima tetrámera y hermafrodita; las laterales trimeras y masculinas. Cáliz ausente. Corola rotácea, con tubo corto y lóbulos erectos. Androceo con 3-4 estambres; anteras ovoideas incluids en el tubo de la corola. Gineceo con 2 estilos, soldados en la base, estigmas capitados. Fruto seco, dídimo, con 1-2 mericarpos, cada uno con 1 semilla, encerrado en una estructura frutífera coriácea con 2-4 cuernos, producida por la acrescencia de los pedúnculos y pedicelos florales.

 

Flora Iberica: Hierbas anuales, salvo una especie extraibérica perenne. Tallos erectos, ascendentes o decumbentes, simples o ramificados, tetrágonos, glabros o setosohíspidos al menos en la porción florífera, sin aculéolos. Hojas formando con las estípulas verticilos de 4, brevemente pecioladas, con 1(3) nervios, glabras. Inflorescencias cimosas, axilares, con 3 flores, dispuestas en verticilos –4 cimas en cada nudo– ± aproximados a lo largo de los tallos, sobre pedúnculos muy cortos, en la madurez acrescentes, recurvados y coalescentes con los pedicelos florales para formar un cuerpo fructífero que cubre los mericarpos. Brácteas foliáceas, decrecientes en tamaño hacia el ápice de las ramitas floridas. Flores hermafroditas y unisexuales –plantas andromonoicas–, actinomorfas, las laterales de cada cima trímeras, masculinas, la central tetrámera, hermafrodita, proterandra. Cáliz inexistente. Corola acopado-rotácea, con 3-4 lóbulos, glabra, amarillo-verdosa, a veces teñida de púrpura, con o sin rafidios. Androceo con 3-4 estambres, exertos; filamentos lisos, insertos en el exiguo tubo corolino; anteras oblongoovoides, dorsifijas. Estilos 2; estigmas capitados. Cuerpo fructífero a modo de capuchón coriáceo constituido por los 3 pedicelos engrosados y cartilaginosos, muy aproximados entre sí y ± curvos, ± piramidal, hemisférico o con dorso prolongado en una prominencia cilíndrica, blanquecino, blanco-amarillento o pardusco, glabro o ± finamente puberulento en la madurez, liso o provisto de aculéolos hialinos muy rígidos, cónicos o muy comprimidos –triangulares–, rectos o ligeramente uncinados, ± abundantes en el dorso o concentrados sobre todo en la prominencia dorsal –cuando existe–, de borde inferior liso o con mayor frecuencia papiloso o fimbriado. Fruto en esquizocarpo, con 1-2 mericarpos. Mericarpos secos, ± reniformes, lisos o papilosos, glabros, de un pardo obscuro o negruzcos, con paquetes lineares de rafidios dorados o blanquecinos en la región próxima al hilo. x = 9, 10 y 11.