Es una enfermedad infectocontagiosa causada por un virus, muy frecuente en la infancia, caracterizada por una erupción de vesículas, que aparecen por brotes, y fiebre moderada.
La varicela es una enfermedad muy contagiosa causada por el virus de la varicela zóster (tipo de virus del herpes) que se caracteriza por sarpullido con vesículas y picazón. El virus se transmite con facilidad de una persona a otra por el contacto con el moco, la saliva o el líquido de las vesículas de una persona infectada o mediante las gotitas que se dispersan cuando una persona infectada tose o estornuda. Por lo general, el sarpullido aparece primero en la cara, el tórax y la espalda y después se extiende al resto del cuerpo. Otros síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, fatiga y pérdida de apetito. En ocasiones, la varicela causa problemas de salud graves, en especial, en lactantes, adolescentes, adultos, embarazadas y quienes tienen un sistema inmunitario debilitado. En los Estados Unidos, la vacunación generalizada contra la varicela desde comienzos de la década de 1990 ha prevenido la mayoría de los casos de esta enfermedad: también se llama lechina.