La neoplasia maligna del pulmón que se atribuye en la mayor parte de las ocasiones al tabaquismo. Otros factores predisponentes son: exposición al acronitrilo, arsénico, asbesto, berilio, éter de clorometilo, cromo, productos derivados del carbón, radiaciones ionizantes, óxido de hierro, gas mostaza, níquel, petróleo, uranio y cloruro de vinilo. Por lo general se desarrolla en pulmones crónicamente enfermos o cicatriciales. A menudo se diagnostica en estadios avanzados y se detectan metástasis antes que la lesión primaria pulmonar. Los síntomas clínicos del cáncer pulmonar incluyen tos persistente, ronquera, disnea, hemoptisis o esputo purulento, dolor precordial o neumonía o brotes de bronquitis de repetición.