Se aplica a la determinación cuantitativa y cualitativa de la materia (sustancia, compuesto, etc.) basándose en el tipo y la cantidad de luz que absorbe. En medicina, la medida del color en una solución mediante determinación de la cantidad de luz absorbida en el espectro ultravioleta, infrarrojo o visible, ampliamente utilizada en química clínica para calcular la concentración de las sustancias de una solución.