La reacción adversa al amoníaco, el cual se produce en el proceso de catabolización de los aminoácidos y de los ácidos nucleicos. Cuando existen enfermedades hepáticas, como cirrosis, el amoníaco se puede acumular en la sangre, lo que se traduce en lesión neurológica. Entre las medidas preventivas se encuentran el crecimiento de las bacterias que producen amoníaco y la restricción de la ingesta de proteínas en la dieta.