El rechazo patológico a la luz; la intolerancia anormal a la luz, originada principalmente por una enfermedad ocular; el temor a la luz por la impresión desagradable e incluso dolorosa que provoca. La fotofobia es una sensibilidad anormal a la luz; puede ser manifestación de enfermedad ocular como la queratitis, uveitis y úlcera corneal, de enfermedad neurológica como la migraña, hemorragia subaracnoidea y la meningitis o de patología mental como la depresión: intolerancia a la luz por causa medioambiental o sistémica.