Ciencia dedicada al estudio de la vida, la salud, enfermedad y muerte del ser humano, y que implica ejercer tal conocimiento técnico para el mantenimiento y recuperación de la salud, aplicándolo al diagnóstico, tratamiento y prevención de las diferentes enfermedades (medicamento o fármaco).
La medicina, y de una manera especial la cirugía, son casi tan antiguas como el hombre. La magia y las prácticas supersticiosas han sido siempre, en los pueblos primitivos, sus misteriosos auxiliares. En el mundo occidental, la invención de la medicina se atribuyó a los dioses (Esculapio, Serapis), hasta que surgió el gran Hipócrates, a quien se debe una verdadera ciencia de curar. La tradición de Hipócrates dominó hasta que, en el s. II, apareció Galeno, la autoridad máxima de la medicina durante doce siglos. En la Alta Edad Media los árabes fueron los monopolizadores de este arte, y, a la zaga de los árabes, los médicos cristianos cobraron renombre, entre ellos Arnau de Vilanova. Las grandes etapas de la medicina, después de la Edad Media son: ss. XV y XVI, etapa fundamentalmente anatómica. Siglo XVII: Harvey, en 1628, cuyo precursor es Servet (1509-53), descubre la circulación de la sangre. Siglo XVIII: los descubrimientos de Lavoisier abren el camino a la química biológica y a la fisiología; Edward Jenner introduce en 1776 la práctica de la vacunación antivariólica. Siglo XIX: la medicina entra por fin en los caminos de la ciencia positiva de tipo anatomoclínico. Siglo XX: era de los transplantes y de la biogenética.