Son las semillas secas de un pequeño árbol asiático, el Strychnos nux-vomica, de las que se obtienen alcaloides, como la estricnina y la brucina. Las semillas se pulverizan y el contenido de estricnina se reduce a poco más del 1%, mediante adición de lactosa, para su uso como tónico amargo y estimulante nervioso: a esta concentración no es seguro. Los remedios homeopáticos de nuez vómica están mucho más diluidos y se consideran seguros.