Es un espacio natural protegido del sur de Brasil, perteneciente al estado de Rio Grande do Sul, cuya superficie queda integrada en los municipios gauchos de Mostardas, Tavares y São José do Norte, dentro del cordón litoral que separa las aguas de la lagoa dos Patos de las del océano Atlántico. Fue declarado parque nacional el 6 de noviembre de 1986 y cuenta con una extensión total de 34.400 hectáreas. Constituye uno de los refugios de aves migratorias más importantes del litoral de Sudamérica, especialmente la lagoa do Peixe (laguna del Pez), que tiene 40 km2 de superficie, una longitud media de 11 km y una profundidad de 20 centímetros. En 1993 el parque fue incluido en la Lista de Humedales de Importancia Internacional del Convenio Ramsar.
La baja salinidad de sus aguas garantiza la proliferación de organismos que sirven de alimento a las más de 40.000 aves migratorias, llegadas tanto del hemisferio norte, como el zarapito esquimal (palmípedo que viaja casi 20.000 km en un mes, tras su periodo de reproducción en el océano Glacial Ártico), como de la zona antártica, como el zarapito hudsónico de Tierra del Fuego, que hace el trayecto inverso. En sentido oeste-este, se pueden contemplar flamencos rosas que emigran desde Chile hasta el parque. Patos, gansos y cisnes se mezclan en sus aguas durante varios meses con los habitantes permanentes, aves locales y roedores como el ratón de bañado (cuyo hábitat son los terrenos húmedos, generalmente cenagosos) y el tuco tuco. El parque está situado en un cordón de arrecifes que separa la lagoa dos Patos del litoral, zona que está sujeta a un fuerte régimen de vientos, que mueve sus dunas arenosas durante varios meses. La laguna constituye también un excelente vivero de camarones, además de peces como el lenguado y la tenca. Durante los periodos de descanso de las aves migratorias, el control de la zona es más rígido para evitar la acción depredadora de los cazadores.