Movimiento de una articulación que supera su amplitud pasiva máxima y altera el alineamiento entre las superficies articulares. A diferencia de una luxación completa, se mantiene un contacto parcial entre los huesos articulados. A menudo es una afección transitoria y la articulación recupera su posición normal, aunque a veces persista la deformidad. Por ejemplo, la subluxación de la clavícula en la articulación acromioclavicular, como resultado de un placaje mal calculado en un deporte de contacto, suele dejar una deformidad si no se trata correctamente. La subluxación suele recurrir, porque se relacione a menudo con una debilidad inherente de la estructura circundante o con una anomalía anatómica.