Es una sustancia que se utiliza en la reposición de la sangre circulante o en la expansión de su volumen; con frecuencia, se administra plasma, albúmina sérica humana, concentrados de hematíes, plaquetas, leucocitos y concentrados de los factores de la coagulación en lugar de transfusiones de sangre completa para el tratamiento de diferentes enfermedades. Entre las sustancias que algunas veces se utilizan en solución para expandir el volumen de sangre se incluyen el dextrano, el almidón, las soluciones de albúmina o la fracción proteica del plasma.