La tos que dura ocho semanas o más. Se puede presentar con otros síntomas, como secreción o congestión nasal, más mucosidad en la parte posterior de la garganta, respiración sibilante, falta de aire o acidez estomacal. La tos crónica puede ser causada por alergias, sinusitis, asma, enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) u otras afecciones. También puede ser causada por el consumo directo de tabaco o por la inhalación de humo de tabaco en el ambiente durante un período largo. Por lo general, mejora cuando se trata el problema que causó la tos; por ejemplo, una tos crónica puede mejorar cuando una persona deja de fumar.