Flora Vascular de Andalucía Occidental: Hierbas anuales o perennes. Hojas opuestas,sin estipulas. Flores en inflorescencia capituliformes, con un involucro de brácteas herbáceas o coriáceas,libres o soldadas;receptaculo cónico,cilíndrico o hemisférico, con brácteas interseminales a veces espinosas. Flores zigomorfas o subacinomorfes, hermafroditas o femeninas. Cáliz cupuliforme o con una plataforma calicina con 4-24 aristas escábridas o plumosas y un epicáliz(involucelo) de varias piezas soldadas. Corola gamopétala,con 4-5 lóbulos, pubescente. Androceo generalmente con 4 estambres alternando con los lóbulos de la corola. Ovario ínfero, bicarpelar, unilocular. Estilo solitario; estigma simple o bilobado. Fruto aquenio, rodeado por el involucelo.

 

Flora Iberica: Hierbas anuales, bienales o perennes, a veces sufruticulosas o sufruticosas, inermes o con acúleos espinosos, con indumento homótrico o heterótrico, de pelos simples, solitarios, basifijos, unicelulares o pluricelulares, aciculares, mazudos o capitados, glandulíferos o eglandulosos, menos frecuentemente en fascículos o bien pelos estrellados. Tallos escapiformes o foliosos y entonces simples o, más frecuentemente, ramificados, con ramificación a menudo subdicótoma- divaricada. Hojas simples, opuestas, pecioladas o sésiles, sin estípulas, ± connatas por sus bases, enteras, dentadas, pinnatífidas, pinnatipartidas o pinnatisectas, las basales a menudo arrosetadas y presentes o no en la antesis. Inflorescencias en capítulo, involucradas, hemisféricas o globosas en la antesis, globosas, ovoides u oblongo-ovoides en la fructificación; involucro con 1-3(5) filas de brácteas herbáceas o coriáceas, libres o soldadas por sus bases, enteras o pinnatífidas, inermes o espinosas; receptáculo convexo, cónico, cilíndrico o filiforme, glabro o peloso, ebracteolado o con bractéolas herbáceo-escariosas e inermes, o coriáceas y espinosas. Flores hermafroditas –rara vez femeninas–, proterandras, tetrámeras o pentámeras, ± iguales o las más externas del capítulo de mayor tamaño, cada una de ellas rodeada en la madurez por un epicáliz urceolado (involucelo). Involucelos homomorfos o heteromorfos en la misma inflorescencia, con o sin eleosoma basal, diferenciados generalmente en un tubo y una corona distal, separados o no por un diafragma que rodea el estilo, menos frecuentemente tubo prolongado en un epidiafragma campanulado, con 8 gruesos nervios confluentes distalmente y delimitando 8 tenues depresiones membranáceas, y culminado entonces por una corona membranácea, plegada e inflexa; tubo coriáceo, prismático y tetrágono, o biconvexo y con 2 tenues depresiones distales, o cilíndrico u obcónico, liso, octosulcado u octoacostillado, con o sin 8 depresiones o fovéolas distales, por lo general peloso; corona formada por numerosos nervios cartilaginosos, o por 8 aristas rígidas –4 más largas y 4 más cortas–, o dentada e inconspicua pero con un diente subulado-falciforme extraordinariamente desarrollado, o bicuspidada, o lobada, o denticulada, o dentado- fimbriada, o bien campanulada y escariosa, simétrica o no, con borde subentero o festoneado, recorrida por numerosos nervios, lisos o escábridos o, si dispuesta sobre un epidiafragma, entonces membranácea e inflexa, fuertemente plegada y sin nervios aparentes; diafragma, cuando presente, coriáceo, plano o cónico. Cáliz gamosépalo, epígino, persistente o caedizo, acopado y con numerosos pelos o dientes, o acopado y con 8-25 aristas ± erectas, escábridas o plumosas, iguales o desiguales, o bien pateniforme, subtetragonal o subpentagonal, a menudo con pelos glandulíferos y (0)1-6 aristas setáceas, escábridas o plumosas. Corola gamopétala, con 4-5 lóbulos –hasta 7 en teratologías–, subactinomorfa –con un lóbulo ligeramente mayor que los restantes– o la de las flores externas del capítulo notablemente zigomorfa, con lóbulos muy desiguales –3 notablemente mayores, el central más grande–, pelosa externamente, glabra o pelosa en el interior del tubo, blanca, rosada, de un rosa violeta o azulada. Androceo con 2-4 estambres, libres, alternipétalos, insertos en el extremo del tubo de la corola; anteras oblongas, mediifijas, exertas, con dehiscencia introrsa por escisiones longitudinales. Gineceo bicarpelar –el segundo carpelo nunca se desarrolla–, con ovario ínfero, unilocular y uniovulado, glabro o peloso, con el rudimento seminal anátropo, unitégmico; estilo terminal, generalmente exerto, liso; estigma seco, con un lóbulo estigmático (o 2 muy desiguales), o bien capitado y ± oblicuo. Fruto en aquenio, encerrado en el involucelo y ± adnato a él, culminado por el cáliz. Semilla albuminosa. x = 5, 8, 9 y 10.