Es un espacio natural protegido del oeste de Brasil que se localiza en el extremo noroccidental del estado de Acre. Constituye la unidad de conservación más occidental de Brasil. Con una extensión de 605.000 hectáreas, ocupa los terrenos de los municipios de Mâncio Lima y Cruzeiro do Sul, en la franja que constituye la frontera entre Brasil y Perú (departamentos de Ucayali y Loreto).
Fue creado con el objetivo de preservar el bosque tropical húmedo en la franja de frontera internacional, por donde discurrirá la futura carretera que unirá esa zona de Brasil con el litoral peruano. En la actualidad persiste la polémica sobre la conveniencia o no de trazar esa carretera. Entretanto, el gobierno brasileño optó por demarcar el parque, para evitar la ocupación depredadora que había sufrido la frontera del sureste de Acre, donde la actividad ganadera incontrolada amenazó el ecosistema de los seringais y el medio de susbsistencia de los seringueiros (personas dedicadas a recolectar caucho), lo que generó una serie de conflictos que culminaron con el asesinato del dirigente seringueiro Chico Mendes.